Desarrollo a los 3 años de edad
Tal y como hicimos en el pasado post donde hablaba del desarrollo de lxs niñxs de 2 años, diferenciaremos el desarrollo físico, desarrollo del lenguaje y del aprendizaje y el desarrollo social y emocional.
Desarrollo físico
En esta etapa juega un papel importante el desarrollo de las habilidades motoras finas. Esto les permite vestirse solxs (si la forma de abrochado no es muy difícil y no necesita atarse los cordones). La habilidad motriz también se puede ver a la hora de dibujar ya que empiezan a sujetar el lápiz con el dedo pulgar y dos dedos, aumentando así su precisión en el trazado.
Tareas como regar el jardín o cocinar, les ayudará a potenciar su habilidad de verter líquidos y cargar recipientes.
Podemos fomentar sus habilidades físicas con tareas que parezcan juegos para ellxs. Balancearse, girar sobre sí mismxs y aguantar el equilibrio con una pierna son ejemplos para desarrollar su cerebelo, encargado de conectar el sistema vestibular con el encargado de controlar el equilibrio en el oído interno.
La coordinación ojo-mano puede desarrollarse con la utilización de puzles de dificultad adecuada para cada menor. Además, a esta edad, ya son capaces de entender las directrices que les da el adulto e intentar resolverlo sin necesidad de que alguien le guie de modo directo durante toda su actuación.
Desarrollo del lenguaje y del aprendizaje
Quizá, en alguna ocasión habéis pensado "¿Cómo puede ser que estxs pequeñxs no paren de hablar si yo estoy que me muero?". Esto se debe a que, entre otros aspectos, el cerebro, a los 3 años, es dos veces más activo que el de lxs adultxs. Preguntan lo que no saben, preguntan mucho, a veces muchísimo. Tanto, que podemos cansarnos de ello. También hablan ellos solos y, como empieza a aparecer la línea del tiempo para ellxs, se puede hablar del pasado y del futuro aunque habrá errores en sus tiempos verbales durante el discurso.
Esto hace que puedan empezar a contar historias breves con una secuenciación de hechos, y les lleva a escuchar con atención historias y cuentos. Pero ¿cómo funciona la atención a los 3 años?
Su capacidad es limitada. La parte del cerebro que permite la concentración tras filtrar la información importante, es el córtex prefrontal. Esta parte es la última en madurar y, además, su baja capacidad de autocontrol interfiere directamente en la atención.
Pero lxs niñxs no solo aprenden cosas que nos gustan. También aprenden a mentir y empiezan a utilizar la mentira como método para librarse de una reprimenda. A pesar de lo que pueda parecer, los estudios confirman que lxs niñxs que empiezan a mentir con 3 años, puntúan más alto en escalas de inteligencia. La diferencia entre la mentira con 3 años y la mentira cuando se es más mayor, es que los primeros lo hacen únicamente para librarse de una situación aversiva para ellxs y los mayores la utilizan como mecanismo de control social.
Desarrollo social y emocional
Con 3 años, lxs niñxs son cada vez más conscientes de su identidad de género y se lo pasan realmente bien jugando a ser adultxs. Juegan a ser mamás, papás, médicxs, tenderxs... Además, asignarles tareas como poner la mesa, pasear al perro o barrer, les encantará y trabajarán la responsabilidad.
Una duda que nos puede surgir y preocuparnos puede ser "¿por qué se va más con su padre o con su madre que conmigo?". A esta edad, lxs menores suelen tener preferencia por el/la progenitor/a que identifican con el mismo rol de género que ellos identifican en sí mismxs.
Aunque sea pronto para que establezcan relaciones sociales igualitarias, ya empiezan a ampliar el sentido de uno mismo e incluyen a otros. Por lo que habrá situaciones en las que compartan juguetes, se turnen, demuestren empatía y jueguen con más personas.
Mónica Blasco.